top of page

ORACIÓN EN FAMILIA

¿Por qué debemos orar a Dios en familia?

Porque es un mandato divino, el  buscar el rostro del Señor en oración, clamor e intercesión, nos comunica con el Reino de los Cielos y nos trae respuestas a esas oraciones. Sin oración tendríamos una existencia completamente vacía, sin sabiduría ni discernimiento de cómo manejarnos en la vida, sin ayuda espiritual para guiar la familia, sin paz, gozo, sin amor, sin fe y al mismo tiempo expuestos a mucha tribulación, a caer en el sistema del error y peor aún que nuestros niños y jóvenes estén expuestos a un mundo diabólico y  en las tinieblas. Pero sobre todo y más importante aun, cuando llegan las pruebas no tenemos suficiente incienso en la copa de oraciones para clamar por la misericordia de Dios.

El señor Jesucristo nos enseña en (Mateo 4:4) No solo de pan vivirá el hombre, sino de toda palabra que sale de la boca de Dios.

Con esto en mente, sabemos que debemos de ser comprometidos con la búsqueda  del conocimiento de Dios, solo así adquirimos sabiduría y está solo viene a nosotros a través del temor al señor. Orar en familia nos lleva a desarrollar esa comunicación con el reino de los cielos que es lo que nuestro padre celestial nos manda hacer.

Lea por un instante y medite, cuáles son las instrucciones del Padre celestial para su creación humana desde  los principios de las generaciones y desde Moises hasta nuestro señor Jesús quien nos dijo: no vine a abolir la ley sino a cumplirla, además El, le ora al padre en (Mateo 6:9-13) diciéndole, hágase tu voluntad en la tierra cómo en el cielo, quiere decir que por siempre y para siempre debemos orar que se haga la voluntad del Padre en nuestras vidas.

Entonces las  instrucciones son de guardar los mandamientos de Dios y mantenernos en oración con acción de gracias para conocer la perfecta voluntad del Padre para nuestra vida y familias .

 

En Deuteronomios capitulos 11 y 28 nos queda muy claro lo que nuestro creador estableció para que las familias de la tierra fuesen bendecidas, pero solo a través de la obediencia.

 

Aquí tenemos dos de estas instrucciones:

 

Deuteronomios 11:8-21 (LBLA)

Guardad, pues, todos los mandamientos que os ordeno hoy, para que seáis fuertes, y entréis y toméis posesión de la tierra a la cual entráis para poseerla; 9 para que prolongues vuestros días en la tierra que el SEÑOR juró dar a vuestros padres y a su descendencia, una tierra que mana leche y miel. 10 Porque la tierra a la cual entras para poseerla, no es como la tierra de Egipto de donde vinisteis, donde sembrabas tu semilla, y la regabas con el pie como una huerta de hortalizas, 11 sino que la tierra a la cual entráis para poseerla, tierra de montes y valles, bebe el agua de las lluvias del cielo. 12 Es una tierra que el SEÑOR tu Dios cuida; los ojos del SEÑOR tu Dios están siempre sobre ella, desde el principio hasta el fin del año. 13 Y sucederá que si obedecen mis mandamientos que os ordeno hoy, de amar al SEÑOR vuestro Dios y de servirle con todo vuestro corazón y con toda vuestra alma, 14 El dará a vuestra tierra la lluvia a su tiempo, lluvia temprana y lluvia tardía, para que recojas tu grano, tu mosto y tu aceite. 15 Y El dará hierba en tus campos para tu ganado, y comerás y te saciarás. 16 Cuidaos, no sea que se engañe vuestro corazón y os desviéis y sirváis a otros dioses, y los adoréis. 17 No sea que la ira del SEÑOR se encienda contra vosotros, y cierre los cielos y no haya lluvia y la tierra no produzca su fruto, y pronto perezcan en la buena tierra que el SEÑOR os da. 

18 Grabad, pues, estas mis palabras en vuestro corazón y en vuestra alma; atadlas como una señal a vuestra mano, y serán por insignias entre vuestros ojos. 19 Y enseñarlas a vuestros hijos, hablando de ellas cuando te sientes en tu casa y cuando andes por el camino, cuando te acuestes y cuando te levantes. 20 Y escríbelas en los postes de tu casa y en tus puertas, 21 para que tus días y los días de tus hijos sean multiplicados en la tierra que el SEÑOR juró dar a tus padres, por todo el tiempo que los cielos permanezcan sobre la tierra.

 

Bendiciones de la obediencia

Deuteronomios 28: 1-14 (LBLA)

 

1 Y sucederá que si obedeces diligentemente al SEÑOR tu Dios, cuidando de cumplir todos sus mandamientos que yo te mando hoy, el SEÑOR tu Dios te pondrá en alto sobre todas las naciones de la tierra. 2 Y todas estas bendiciones vendrán sobre ti y te alcanzarán, si obedeces al SEÑOR tu Dios: 3 Bendito serás en la ciudad, y bendito serás en el campo. 4 Bendito el fruto de tu vientre, el producto de tu suelo, el fruto de tu ganado, el aumento de tus vacas y las crías de tus ovejas. 5 Benditas serán tu canasta y tu artesa. 6 Bendito serás cuando entres, y bendito serás cuando salgas.

7 El SEÑOR hará que los enemigos que se levanten contra ti sean derrotados delante de ti; saldrán contra ti por un camino y huirán delante de ti por siete caminos. 8 El SEÑOR mandará que la bendición sea contigo en tus graneros y en todo aquello en que pongas tu mano, y te bendecirá en la tierra que el SEÑOR tu Dios te da. 9 Te establecerá el SEÑOR como pueblo santo para sí, como te juró, si guardas los mandamientos del SEÑOR tu Dios y andas en sus caminos. 10 Entonces verán todos los pueblos de la tierra que sobre ti es invocado el nombre del SEÑOR; y te temerán. 11 Y el SEÑOR te hará abundar en bienes, en el fruto de tu vientre, en el fruto de tu ganado y en el producto de tu suelo, en la tierra que el SEÑOR juró a tus padres que te daría. 12 Abrirá el SEÑOR para ti su buen tesoro, los cielos, para dar lluvia a tu tierra a su tiempo y para bendecir toda la obra de tu mano; y tú prestarás a muchas naciones, pero no tomarás prestado. 13 Y te pondrá el SEÑOR a la cabeza y no a la cola, sólo estarás encima y nunca estarás debajo, si escuchas los mandamientos del SEÑOR tu Dios que te ordeno hoy, para que los guardes cuidadosamente; 14 no te desvíes de ninguna de las palabras que te ordeno hoy, ni a la derecha ni a la izquierda, para ir tras otros dioses y servirles.

 

Si nos dedicamos a la obediencia, santidad, humildad y mansedumbre, Él nos guiará y nos bendecirá con amor, protección y provisión.

 

Le pido que reflexione y más aún  medite en la palabra de Dios y sus ordenanzas cómo dice el libro de ( Josué 1:8-9) 

Este libro de la ley no se apartará de tu boca, sino que meditarás en él día y noche, para que cuides de hacer todo lo que en él está escrito; porque entonces harás prosperar tu camino y tendrás éxito. 9 ¿No te lo he ordenado yo? ¡Sé fuerte y valiente! No temas ni te acobardes, porque el SEÑOR tu Dios estará contigo dondequiera que vayas.

 

Aquí le compartimos los principales beneficios de porque usted se debe ocupar en la oración con su familia:

  1. Comunicación con Dios: La oración como familia nos permite comunicarnos con Dios, nuestro Padre Celestial. Al orar juntos, estamos demostrando fe y sirviendo a Dios por medio de nuestras oraciones.                                                                                                   

  2. Bendiciones y paz en el hogar: La oración trae bendiciones y paz a nuestro hogar. Cuando oramos como familia, el Espíritu Santo puede traer sentimientos de consuelo y un espíritu de amor. También puede retirar la tensión y traer felicidad duradera a nuestra familia.                                                                                                                          

  3. Fortalecimiento del amor y la unidad: La oración familiar fortalece nuestro amor cuando oramos unos por otros. También puede bendecir a las generaciones futuras. Al orar juntos, nos acercamos más a Dios y nos volvemos más unidos como familia.                                                                                                                                              

  4. Intercesión por otros: Al orar con nuestra familia, recordamos las necesidades de otros. Podemos orar por las personas tristes o necesitadas a nuestro alrededor, así como por aquellos que tienen responsabilidades en la Iglesia.                                           

  5. Instrucción y ejemplo: Oramos con nuestros hijos para instruirlos en el camino del Señor. Al hacerlo, les enseñamos a confiar en la misericordia y protección divina, y a mantener una vida de temor y obediencia a Dios.

 

Dios “es galardonador de los que le buscan” (Hebreos 11:6). Tu Padre Celestial quiere ayudarte a seguir adelante. Jesús enseñó: “Orad al Padre en vuestras familias, siempre en mi nombre, para que sean bendecidos [vuestros cónyuges] y vuestros hijos.” . Cuando oran como familia, el Espíritu Santo puede traer sentimientos de consuelo y un espíritu de amor a tu hogar. La oración familiar puede relajar la tensión y traer felicidad duradera a tu familia. Te puede ayudar a ti y al resto de tu familia a ser más paciente, amable, humilde y a perdonar.

  1. 1 Tesalonicenses 5:16-18 (LBLA):
    “Estad siempre gozosos; orad sin cesar; dad gracias en todo, porque esta es la voluntad de Dios para vosotros en Cristo Jesús.”                                                                      

  2. Filipenses 4:6-7 (LBLA):
    “Por nada estéis afanosos; antes bien, en todo, mediante oración y súplica con acción de gracias, sean dadas a conocer vuestras peticiones delante de Dios. Y la paz de Dios, que sobrepasa todo entendimiento, guardará vuestros corazones y vuestras mentes en Cristo Jesús.”                                                                                                                  

  3. 1 Juan 5:14 (LBLA):
    “Y esta es la confianza que tenemos delante de Él, que si pedimos cualquier cosa conforme a su voluntad, Él nos oye.”                                                                                      

  4. Colosenses 4:2 (LBLA):
    “Perseverad en la oración, velando en ella con acción de gracias.”                                                    

  5. Jeremías 29:12 (LBLA):
    “Me invocaréis, y vendréis a rogarme, y yo os escucharé.”                                                    

  6. Marcos 11:24 (LBLA):
    “Por eso os digo que todas las cosas por las que oréis y pidáis, creed que ya las habéis recibido, y os serán concedidas.”                                                                                                                                   

  7. Romanos 12:12 (LBLA):
    “Gozándoos en la esperanza, perseverando en el sufrimiento, dedicados a la oración.”                                                                                                                                     

  8. Salmo 145:18 (LBLA):
    “El Señor está cerca de todos los que le invocan, de todos los que le invocan en verdad.”                                                                                                                                     

  9. Hechos 16:25 (LBLA):
    “Como a medianoche, Pablo y Silas oraban y cantaban himnos a Dios, y los presos los escuchaban.”                                                                                                                            

  10. Jeremías 33:3 (LBLA):
    “Clama a mí, y yo te responderé y te revelaré cosas grandes e inaccesibles, que tú no conoces.”                                                                                                                                    

  11. Mateo 6:7 (LBLA):
    “Y al orar, no uséis repeticiones sin sentido, como los gentiles, porque ellos se imaginan que serán oídos por su palabrería.”                                                                       

  12. Mateo 18:20 (LBLA):
    “Porque donde están dos o tres reunidos en mi nombre, allí estoy yo en medio de ellos.”                                                                                                                                         

  13. Salmo 18:6 (LBLA):
    “En mi angustia invoqué al Señor, y clamé a mi Dios; desde su templo oyó mi voz, y mi clamor delante de Él llegó a sus oídos.”                                                                            

  14. Mateo 6:6 (LBLA):
    “Pero tú, cuando ores, entra en tu aposento, y cuando hayas cerrado la puerta, ora a tu Padre que está en secreto, y tu Padre, que ve en lo secreto, te recompensará.”                  

  15. 1 Juan 5:15 (LBLA):
    “Y si sabemos que Él nos oye en cualquier cosa que pidamos, sabemos que tenemos las peticiones que le hemos hecho.”                                                                                                  

  16. Santiago 5:16 (LBLA):
    “Por tanto, confesaos vuestros pecados unos a otros, y orad unos por otros para que seáis sanados. La oración eficaz del justo puede lograr mucho.”                                           

  17. Santiago 1:6 (LBLA):
    “Pero que pida con fe, sin dudar; porque el que duda es semejante a la ola del mar, impulsada por el viento y echada de una parte a otra.”                         

Oración

Señor Jesús, hoy te pedimos que dirijas a cada familia a regresar a tu camino, mandamientos y estatutos para que puedan tener una familia consagrada a ti,  haciendo tu voluntad y conocedores de su propósito y destino para el que fueron enviados, bendice sus entradas y salidas, cuida de sus niños y jóvenes, dales la sabiduría que necesitan y sobretodo el Espíritu de Temor al Señor para que tengan una vida victoriosa en ti, te lo pedimos en el nombre de Yahshua. Amén.

bottom of page